Como hemos introducido en la definición de marketing inclusivo, no es suficiente pensar sólo en la mayoría, porque ésta no es representativa del todo. El CONSUMIDOR no es un estándar, es un grupo diverso que si bien tiene necesidades y deseos comunes, también los tiene diferentes. De ahí que la mayoría no represente a todos. Veámoslo en detalle.
Pie de foto: De la misma manera que el cubo rubik tiene seis caras iguales pero distintas, las personas también somos todas iguales pero diferentes, únicas e irrepetibles. En las caras del cubo cambia su color; en las personas, nuestras capacidades, ya que todos poseemos unas y carecemos de otras. Para completar el cubo no podemos olvidar ni uno de sus seis colores. Todos somos igualmente importantes.
La mayoría de las personas camina, pero no todas lo hacen:
Hay quien se desplaza en silla de ruedas, o con muletas, e incluso ya se están generalizando los Scooter entre los más mayores para salir a la calle a realizar compras y gestiones. Un simple escalón les corta el paso y el derecho a usar, consumir y ser iguales.
-La mayoría de las personas ve, pero no todas lo hacen:
Hay quienes no vemos nada, o hay quien ve con dificultad. Y, por ejemplo, la fecha de caducidad de un yogurt, o los ingredientes de una leche infantil, o el código QR de un refresco no son legibles ni detectables para aproximadamente 1 millón de personas que tienen problemas visuales en España. Cita a ciegas en tu propio frigorífico.
-La mayoría de las personas oye, pero no todas pueden hacerlo:
Hay personas que para entenderte te leen los labios o que leen lo que escribes, y hay otras personas que sólo se expresan y entienden bien la lengua de signos. Esto no lo sabe la cajera del súper que te habla mirando al teclado o el editor de un vídeo promocional corporativo lleno de voces en of sin subtítulos.
-La mayoría de las personas puede recordar, leer, memorizar y entender conceptos complejos, pero no todas pueden:
Hay quien necesita un lenguaje sencillo para entender y expresarse, quien necesita de colores y pictogramas para comprender, o quien requiere de ayuda para recordar. Un manual para hacer manuales.
-La mayoría de las personas puede comer de todo, pero no todas lo hacen:
Hay quien no puede ingerir gluten o frutos secos, o incluso quien tiene que controlar mucho su ingesta de azúcar e incluso quien no quiere comer carne. Por ello cada día es más habitual ver en las cartas y menús de los restaurantes indicaciones para saber si los platos son aptos para celiacos, diabéticos o vegetarianos. La inclusión también puede ser muy sabrosa.
Tres grandes grupos sociales que debemos incluir
Queda claro que el todo es más diverso que la mayoría, y que si no lo tenemos en cuenta, estaremos excluyendo a los siguientes tres grupos sociales:
• MAYORES DE 65 AÑOS: grupo cada vez más numeroso, casi el 20% de la población que según se hace mayor va teniendo diversidad funcional debido a las necesidades especiales para realizar sus actividades diarias.
• Personas con diversidad funcional: el 10% de la población. Ttienen necesidades especiales debido a sus capacidades físicas, sensoriales, cognitivas o alimentarias. Para llevar una vida “normal”se apoyan en sus capacidades.
• Todos los QUE TIENEN TEMPORALMENTE ALGUNA necesidad funcional especial: son LESIONADOS, EMBARAZADAS, padres o madres con carrito… Se estima que son el 10%.
Sin duda un mercado cualitativamente importante que no para de crecer en derechos buscando la igualdad real de todas las personas. Y un mercado cuantitativamente nada despreciable ya que supone casi el 40% de LA POBLACIÓN.
La pregunta es si para las empresas poner en marcha acciones de marketing inclusivo es beneficioso y rentable. La respuesta es rotundamente sí, como trato de explicar en esta Web.